En todos los cursos de Zentangle explico algo muy importante acerca de los errores.
Esta mañana he visto esta imagen en Facebook y me ha dado que pensar.
Siempre he pensado que la perfección es lo más imperfecto que existe. ¿Cuando llegas a ella?, ¿quien decide lo que es perfecto, y lo que es muy bueno?, ¿donde está el límite?… Y sobre todo, ¿merece la pena estar buscando la perfección, cuando ya has llegado al estado de “muy bueno”, con el trabajazo que debe suponer eso?
A mi, desde luego que no.
Voltaire decía que “lo perfecto es enemigo de lo bueno”. Estoy totalmente de acuerdo.
Una de las cosas que me entusiasman de Zentangle es el concepto de NO HAY ERRORES.
Rikc y Maria, creadores del método, dicen que en la vida, cuando cometes un error, no existe ninguna goma de borrar que lo elimine. ¿Que hace uno cuando se equivoca? Intenta arreglar el error como se pueda, o , si no hay forma de arreglarlo, sigues adelante, y acabas adaptándote a la nueva situación. Al cabo de un tiempo ese error no se ve, está incorporado a tu vida. Y pronto, ni siquiera se recuerda.
Pues en Zentangle pasa lo mismo.
Cuando te equivocas en una linea, si dibujáramos a lápiz, se podría borrar. Pero como dibujamos directamente con rotulador, sin ninguna plantilla previa, no hay forma de borrar la equivocación. ¿Y que sucede? Que empezamos a pensar cómo podemos arreglar esa linea, que no debería estar donde está. Y comenzamos a buscar soluciones para mejorar lo que no nos gusta, y… a veces encontramos que, lo que era un error, ahora nos gusta mucho más, con esa modificación que hemos hecho. Y hemos mejorado mucho nuestro trabajo, y nos sentimos fenomenal.
Y otras veces, no aparece la solución, y no hay manera de eliminar esa dichosa linea. Y cada vez que miramos el trabajo, se nos van los ojos a esa zona… durante un rato. Seguimos adelante, dibujando en el resto de la tesela, y descubrimos, que una vez acabada, aquello ya no se nota tanto. Casi no lo vemos. Y el resto del dibujo, nos ha quedado muy bien. Y al cabo de otro rato, ya ni nos acordamos de donde estaba… y el conjunto nos gusta mucho, y nos sentimos fenomenal.
Así que.. ¿ para que perder el tiempo buscando la perfección?
Estoy segura de que no existe. Es como querer llegar al infinito…